Versiones del microcuento
Microcuento original: El avión Te subirás a ese avión que tanta oscuridad te brindó. Subirás, con los pies temblando, la sonrisa más inventada que te permita el momento de tensión y el "buen día" más cálido que puedas otorgarle a la azafata. Te sentarás en el asiento 15B, entre dos personas para sentirte protegida. Al lado tuyo va a haber un monje, ¿casualidad? tal vez. Que rece por vos, le pedirás, que rece por vos. Sacarás tu libro, ese que tantas veces te reconfortó, que tantas veces te acompañó, pero no podrás leer ni la introducción. Porque esas páginas que alguna vez te convirtieron en lo que sos, hoy ya no te permiten seguir creciendo y cambiando. Dormirás. O intentarás dormir. Porque los temores del pasado vuelven cargados de pensamientos nuevos, y los escalofríos del futuro y la incertidumbre se harán carne en vos. Despegará el avión, sus ruedas se separarán del piso y sentirás como el temor va desapareciendo. No, desapareciendo no, acostumbrándose. Haciéndose uno